“Somos cristianos, pero vivimos como paganos”, lamentó el Papa Francisco este viernes 5 de octubre en la Misa celebrada en su residencia de la Casa Santa Marta.
En su homilía, el Santo Padre denunció la hipocresía de aquellos que “se sienten orgullosos de ser cristianos” pero viven como si no lo fueran. Para esas personas, el cristianismo es “como un hábito social”, pero “han expulsado a Jesús de sus corazones”.
Por ello, el Papa advirtió del peligro al que se enfrentan esos cristianos que viven su fe “como un hábito social”. Son cristianos que dicen: “He recibido mucho del Señor, he nacido en una sociedad cristiana, he conocido a Jesucristo, he conocido la salvación”, pero al mismo tiempo, con mucha facilidad se olvidan de Jesús.
“Ese hábito –continuó – nos hace daño porque reducimos el Evangelio a un hecho social, sociológico, y no a una relación personal con Jesús”.
Recordó que “Jesús me habla, te habla, nos habla a cada uno de nosotros. La predicación de Jesús es para cada uno de nosotros”.
El Santo Padre se preguntó: “¿Cómo es posible que aquellos paganos que, nada más escuchar la predicación de Jesús, van con Él, y yo que he nacido en una sociedad cristiana me habitúo y vivo el cristianismo como si fuera un hábito social, una vestimenta que me pongo para luego quitármelo?”.
En este sentido, Francisco aseguró que quien actúa así se comporta con hipocresía, con la “hipocresía de los justos”.
“Está la hipocresía de los pecadores, pero la hipocresía de los justos es el miedo al amor de Jesús, el miedo a dejarse amar. Y, en realidad, cuando hacemos esto, estamos tratando de gestionar nosotros mismos la relación con Jesús”.
Es actitud consiste en decir: “Sí, yo voy a Misa, pero tú quédate en la Iglesia que yo me voy a casa”. Entonces, lamentó el Papa: “Jesús no regresa con nosotros a casa: en la familia, en la educación, en los hijos, en la escuela, en el barrio…”.
Por eso, el Papa invitó a hacer examen de conciencia repitiendo estas palabras: “Ay de ti, ay de ti”. El Papa lo explicó: “Ay de ti, porque te he dado mucho, me he dado a mí mismo, te he elegido para ser cristiano, para ser cristiana, y tú has preferido una vida a medias, una vida superficial”.
“Cuando se vive con esta hipocresía cristiana, aquello que hacemos y expulsar a Jesús de nuestro corazón. Actuáramos como si lo tuviéramos en nosotros, pero lo hemos expulsado. Somos cristianos orgullosos de ser cristiano, pero vivimos como paganos”, concluyó.